Buena ubicación , Kanda station a cinco minutos andando,barrio tranquilo con restaurantes cerca ,cafeterías y seven eleven , habitaciones pequeñas pero lo habitual en Japón,los colchones de las habitaciones de dos camas muy bien ,pero las de matrimonio son futones y son bastante duras ,me costó acostumbrarme,está muy limpio todo, y el ambiente del hotel es muy bueno con el billar ,y la pequeña cafetería en recepción,tienen un sistema de puntos muy original si quieres tomar algo antes de ir a dormir ,me gustó que tengas esa posibilidad,el personal muy muy amable y atento,te ayudan en todo, la úinica pega es que las lavadoras no secan lo suficiente, la última noche puse una lavadora y tuve que secarla como 4 veces y al final me la traje de Tokyo a España chorreando,un desastre,porque nos íbamos a la mañana siguiente ,pero el hombre de recepción me devolvió el dinero y me pidió perdón mil veces,volvería a este hotel ?creo que sí, aunque las habitaciones son realmente pequeñas, la maleta abierta no cabe y si llevas dos grandes ,es imposible,pero si vas a estar pocos días está muy bien .